Política local - Ayuntamiento

El Ayuntamiento da "cerrojazo" a la Universidad Popular.

18 Ene 2012

Los usuarios y profesores de la Universidad Popular se sienten engañados e indignados por el cierre de la misma.

El Ayuntamiento de Caudete ha tomado la decisión de cerrar temporalmente la actividad de la universidad popular hasta que entren en vigor las nuevas tasas aprobadas inicialmente el 30 de diciembre pasado.

Esa modificación de tasas supone una subida en muchos casos superior al 200 % que hará que numerosos usuarios tengan que abandonar las clases. 

La Universidad de Caudete ha sido y todavía sigue siendo, un referente para toda la provincia y la comarca, por la calidad de las enseñanzas impartidas, por la idoneidad de sus instalaciones, por la enorme participación de los usuarios que superan en número a Universidades Populares de muchas localidades de mayor tamaño y por los excelentes resultados obtenidos por sus alumnos.

Profesores, personal de la Casa de Cultura, monitores, Ayuntamiento y alumnos han venido trabajando para obtener esos magníficos resultados y forman parte ya del patrimonio cultural de nuestro pueblo.

El curso pasado se matricularon poco menos de 500 alumnos, en 18 especialidades (acuarela, bailes de salón, bolillos, bordado, cata de vinos, cocina tradicional, corte y confección, fotografía digital, informática, micología, historia, tai-chi, yoga iyengar, yoga, escritura creativa, restauración de muebles, vivir en positivo y cerámica). 

Los resultados obtenidos podían apreciarse en la gala de clausura de los cursos que abarrotaban el auditorio y en las exposiciones posteriores muy visitadas,  pero donde verdaderamente se aprecian estos resultados es en la propia satisfacción personal de los alumnos. 

Acciones como la enorme subida de tasas, esta suspensión temporal de actividades o el retraso que se produjo en el inicio del presente curso ponen en serio peligro la continuidad de la Universidad Popular de Caudete.

Esta sucesión en tan poco tiempo de tantos ataques parece esconder la estrategia de suprimir un servicio en el que no se cree, una estrategia que intenta o parece intentar que los usuarios, los profesores y los funcionarios se cansen de tanto obstáculo y abandonen.  

Estas medidas están provocando un hondo malestar entre la mayoría de los usuarios y algunos profesores. Los alumnos se sienten engañados ya que han pagado una matrícula y no entienden por qué se ha desmantelado la universidad sin previo aviso.

No parece ajustado a derecho que se cancelen temporalmente cursos impartidos por monitores contratados por el ayuntamiento sin que esto suponga un incumplimiento de contrato de servicio o laboral. De la misma manera que tampoco es razonable que se prive de un servicio ofertado a un usuario por el que ha pagado matrícula.

Esperemos que solo se trate de torpeza y que finalmente triunfe la cordura y se recuperen sin alteraciones todos los cursos de la Universidad Popular de Caudete que son, para muchos, fuente irremplazable de conocimiento, disfrute y realización personal.

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